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lunes, 8 de marzo de 2021

AFUERA EN EL EXTERIOR ~ Epistolario del 21 ✒📮



Mi buena amiga Alison:

Al igual que tú, estoy preparando nuestro hogar para la llegada de la primavera. Sonrío al leer en tu carta que según un dicho irlandés, en marzo, la primavera entra como un cordero para acabar a final de mes siendo león. Ojalá sea así. Ojalá podamos disfrutar lo antes posible de jornadas al sol, de desayunos, aperitivos y comidas, de lecturas y reflexiones sentados en nuestros porches teniendo por vistas: los árboles distraídos, las plantas explosionando, las flores adueñándose con sus colores de todos los rincones y el bendito cielo azul despejando nuestra existencia. Cómo no desearlo, con lo deliciosa que resulta la vida cuando transcurre en el exterior una vez superado el invierno. Me invade, mi querida Alison, la misma necesidad ahora de primavera y de su luz como en septiembre me invade la necesidad de otoño. La ansío como ansío el equinoccio de otoño, cuando la luz y las sombras, el día con la noche, se equilibran y nos aboca a que se produzca algo parecido en nuestro interior. Si entonces deseo el equilibrio, la calma y la quietud del hogar, ahora anhelo esa vida de afuera con su movimiento ajetreado y feliz y su balanceo travieso. Anhelo contemplar como la vida vuelve tras su recogimiento. Te confieso sentir en estos días una leve agitación en cada fibra de mí ser, similar a la que se percibe cuando realizados todos los preparativos sólo resta que se lleve a cabo en unas horas la celebración. De ese modo me noto, mi estimada Alison, noto que la primavera está a punto de aparecer y su festival a punto de comenzar. Me cuentas que tu corazón canta contento por lo que está por llegar, que estás acondicionando el jardín, preparando bancales para las verduras, pintando de rosa claro el gallinero, me relatas al detalle cómo de feliz te hizo una jornada hace dos semanas en que el sol radiante inundó tu cocina y tú abriste la puerta para darle la bienvenida, tendiste la colada al sol y tus “chicas” (tus gallinas) se pasearon alegremente; y cuando al día siguiente el invierno regresó casi entraste en depresión. ¡Qué hermosos son los días extraviados!, mi querida amiga. Este sábado se produjo, aquí, algo muy parecido, se presentó desde primera hora uno de esos días que de antemano sabes que son un regalo. El sol generoso nos llenó de positividad y energía. Estar en el exterior resultó ser un verdadero placer y aprovechamos para organizar el porche con los muebles nuevos que justamente nos trajeron a primera hora de esa mañana. Y, si bien, al día siguiente la lluvia, el viento, el frío intenso y el cielo plúmbeo regresó; la calidez y la belleza de esas horas primaverales se quedaron en mi corazón como un bonito recuerdo y en mi piel como una invitación para asistir a una función que se celebrará en unas semanas. Hay esperanza mi querida Alison. Te escribo esto sonriendo y sé que al leerlo sonreirás. Hay esperanza mi querida irlandesa: la primavera está a la vuelta de la esquina y creo que este año pocos son los que en su interior no están a esta hora sintiendo su bullir, cometiendo locuras por ella, deseando verla aparecer como se anhela ver al enamorado.

Ya me contarás, Alison, como fue tu primer día, mientras tanto te abrazo fuertemente en esta jornada de la mujer, conociendo ambas de primera mano que ser mujer no es estar a la contra, no es en absoluto sentir como enemigo a todos y todo, que ser mujer jamás va a depender ni del lenguaje inclusivo ni de una manifestación. Ambas sabemos que por fortuna es mucho más que todo eso. Y tan grave es restarle importancia, como dar por bueno que te expliquen qué es serlo o decidan que por serlo, de inicio, necesitas ayuda. Además, cada una de nosotras, decidió hace mucho entre ser ejemplo e inspiración todos los días de todos los años de su vida, o ser la que porta la pancarta, que no la voz, una vez al año.

Disculpa, mi querida amiga, la digresión. Te reitero mi necesidad de saber de ti, pues tus trajines me son a la par divertidos y muy enriquecedores.


María Aixa Sanz 

(La Madriguera,  8 de Marzo de 2021 )