«Y, una y otra vez, los
imperios caen y la literatura sigue. En definitiva, los lugares imaginarios que
los escritores y sus lectores inventan persisten sencillamente porque son
aquello que deberíamos llamar realidad, porque son el mundo real revelado con
su verdadero nombre. El resto, como a esta altura deberíamos haber advertido,
no es más que una sombra sin sustancia, el material con el que están hechas las
pesadillas, y que desaparecerá sin dejar rastro a la mañana.»
[#lecturasquesuman:
Lecturas de 12, es decir, las que te invitan a subrayarlas con un lápiz.]